4 claves para triunfar en el sector retail

1. No intentes apostar por una audiencia tan amplia

Entre más específico sea tu público meta, más oportunidades tendrás de invertir y vender con éxito en la industria retail. Estudia los productos que ofreces y el perfil de las personas que los compran, de esta manera podrás verificar el tipo de consumidor al que te estás dirigiendo. Con el tiempo y con ayuda de esta información podrás crear ofertas personalizadas e incluso adquirir otros productos que complementen el que ya vendes para aumentar las oportunidades de negocio.

2. Prepara a tu personal

Tus colaboradores son quienes dan la cara por la empresa al tener contacto directo o indirecto con los clientes. Por consiguiente, es clave contar con un equipo totalmente capacitado y que tenga las habilidades necesarias para brindar un excelente servicio. Asimismo, deben conocer perfectamente los productos que ofrecen, y mantener una actitud que refleje la misión y visión de la empresa. Tu proceso de selección y entrenamiento de personal debe tener estos objetivos bien presentes para establecer un equipo ideal y de alto rendimiento.

3. Estandariza tus procesos y herramientas

Parte valiosa de la industria retail es contar con procesos estandarizados y claros. Estos ayudan a tener un mayor control desde el trato con los proveedores, la adquisición de mercancías, la distribución de artículos y la venta de los mismos. Si tu organización no cuenta con procedimientos transparentes y comprensibles para todos los involucrados, es posible que haya pérdidas y retrasos frecuentes. La tecnología es un gran apoyo, pues existen plataformas de gestión que ayudan a tener una comunicación clara con todos los participantes de la cadena de distribución. Además de monitorear el inventario, la entrada y salida de productos, los envíos, las transacciones y la actividad del cliente.

4. Opta por un enfoque D2C

El comercio D2C se trata de que un fabricante vende sus productos directamente a los consumidores. Este modelo del sector retail elimina la parte del intermediario y permite que el productor mantenga sus precios y adquiera una cartera de clientes más amplia. Si tu empresa se encarga de la manufactura de artículos, este esquema puede ser muy beneficioso para ti.